A man playing mini golf in his office

Productividad

Sorprendentes motivos por los que debería empezar a procrastinar ahora

Tiempo de lectura:  4 minutos

Un estudio demuestra que se pueden conseguir muchas cosas procrastinando: buenas noticias para el procrastinador en serie Ben Hammersley

 

Tener que escribir sobre procrastinación puede parecer una broma, así que nos lo quitaremos de encima ahora mismo.

Tengo muchos libros sobre el tema, pero aún no los he leído. Hay técnicas para superarlo que debo aprender, pero no lo haré hoy. También tengo que escribir un artículo, pero… bueno, eso. A lo que vamos. La lista de "Cosas que le debo a mi editor" ha seguido creciendo.

Vale. Bromas a parte… necesitamos replantearnos el tema de la procrastinación. No tiene por qué ser necesariamente algo tan malo. De hecho, puede que realmente le convenga procrastinar (y volveremos a hablar de ello en breve).

Pero, primero, ocupémonos de aclarar las definiciones. Hay muchas razones por las aplazamos las cosas. Hay personas que evitan algunas tareas por miedo al fracaso (o al éxito) y a todos los cambios que comportarían. Lo hacen para proteger el "statu quo" de sus vidas y para protegerse a ellos mismos del ataque de ego que comportan los cambios.

Algunas personas como yo, con todo tipo de sustancias químicas en el cerebro relacionadas con el TDAH, parecen procrastinar para fortalecer una de las principales hormonas relacionadas con el riesgo sin la cual nuestro cerebro es inútil. A este tipo de personas no les ocurrirá nada hasta que el proyecto se lance, o hasta que el medicamento haga efecto. Otros harán todo lo posible para evitar tomar decisiones, simplemente para evitar ser responsables de las consecuencias.

Quizás la mayoría procrastina porque distraerse en Twitter es más interesante que una hoja de cálculo. Independientemente del motivo que tenga (y no se preocupe, no necesita identificarlo ahora), no es la única persona que lo hace. Se considera que aproximadamente un 20 % de la población padece de "procrastinación crónica".

Ignore su voz interior

Pero, aunque todas estas razones sean totalmente comprensibles de muchas formas o incluso completamente válidas, hay otra razón por la cual es bueno aplazar tareas por un tiempo. Resulta que es bueno para usted.

En serio. Aplazar un proyecto, especialmente uno con problemas abstractos que resolver, puede ser una decisión totalmente razonable. Puede ayudarle. La procrastinación puede ser una forma de dejar que su cerebro trabaje en una tarea compleja en segundo plano sin que el exceso de cavilaciones conscientes o el ego interrumpan. También puede ser una forma de identificar lo que realmente no quiere hacer. Es una oportunidad de descubrirse a uno mismo.

El primer caso es un fenómeno conocido(1). Y esa es la razón por la cual la gente tiene buenas ideas en la ducha, cuando se levantan o cuando van a correr. Cuando deja que un problema pase en segundo plano en su cerebro, y especialmente fuera de su centro de atención, permite a su cerebro plantear el problema desde otro ángulo, sin ninguna voz interior que le interrumpa. Y es esa voz interior la que le disuade de tomar las decisiones más efectivas o perspicaces. Cuando se libera de ella, permite que el problema madure en el fondo de su mente y puede entonces obtener mejores soluciones.

Una bola de papel arrugada y un esbozo de un globo aerostático

La procrastinación puede ser una forma de dejar que su mente trabaje en segundo plano en una tarea compleja

 

Tómese su tiempo

Ya han habido estudios sobre el tema. En la década de los 20, la psicóloga soviética Bluma Zeigarnik realizó una serie de experimentos que le condujeron a una particularidad, más tarde denominada efecto Zeigarnik(2), que afirma que las personas recuerdan las tareas incompletas o interrumpidas más que las completadas. En otras palabras, las tareas procrastinadas le perseguirán.

O bien, tal como sugirió la misma Zeigarnik en 1927, los estudiantes que toman un descanso para hacer algo distinto que no esté relacionado con la tarea tienden a recordar el temario mejor que los estudiantes que no hacen ninguna pausa. Al igual que ocurre con todas las facultades cognitivas, las metáforas sobre dejar reposar las ideas para que maduren son literalmente erróneas pero figurativamente correctas. Dejar un poco de tiempo a las cosas funciona.

Descúbrase personalmente

Esto ayuda a ser consciente sobre por qué aplaza una tarea. Dejar reposar algo es una cosa. Pero procrastinar por otros motivos puede ser una señal de que hay algún problema.

Por ejemplo, una procrastinación demasiado duradera en un proyecto específico puede indicar que no es el proyecto adecuado para usted. Si nunca encuentra el momento para hacer algo, puede ser porque realmente no quiere hacerlo. Cree que quiere o debe hacerlo, o es algo igual de irritante pero al fin y al cabo menos importante que el verdadero conocimiento de uno mismo. La procrastinación es el camino hacia el progreso. Quiero decir, en algún momento. Cuando encontramos el momento de hacerlo.

El comportamiento, tal como la procrastinación y el juicio entorno a esta, está tan estrechamente relacionado con otras creencias culturales sobre el valor y la ética del trabajo que puede llegar a ser difícil dejar de lado las connotaciones negativas. Pero, visto con claridad, la procrastinación puede ser una herramienta excelente para solucionar problemas inmediatos (si se usa adecuadamente), así como situaciones de la vida más generales. Como mínimo, vale la pena prestarle atención. Incluso aunque nos encontremos en situaciones en las que queremos encontrar otro argumento para procrastinar y no podamos. Ah, y de eso ya hablaremos mañana.

 


Ben Hammersley es un locutor de radio, escritor, periodista y tecnólogo de Internet británico, radicado en EE. UU.

Fuentes: 

(1) http://uk.businessinsider.com/why-people-get-their-best-ideas-in-the-shower-2016-1

(2) https://en.wikipedia.org/wiki/Zeigarnik_effect